Gente que me inspira #2 - Ceci

La conocí en el primer año de la facultad por amigas en común y pronto nos hicimos amigas. Fanáticas de los Beatles, compartíamos trivia y canciones, como todas las del grupo. Pero nosotros conectamos cuando nos dimos cuenta que compartíamos el mismo gusto por las pelis viejas.

Una de las primeras conversaciones que tuvimos fue casi una adivinanza. Yo había visto una película que me había fascinado, pero no me acordaba el nombre ni el director. Entonces se la empecé a describir y casi instantáneamente me dijo "¡Es de Vértigo!". Admiradoras de todas las pelis de Hitchcock, Humphrey Bogart y Fred Astaire, nos juntábamos a hacer piyamadas viendo pelis como Singin' in the rain y repitiendo los diálogos más graciosos "Yes, yes, yes, no, no, no".

Ella es como una de esas actrices de los 40: una femme fatale por naturaleza. Es sexy, atrevida y seductora. No tiene que hacer nada para conseguirlo, simplemente le sale. Es de esas personas dadas, buena onda, simpáticas, cuya compañía es de lo más placentera. Para citar a unos de sus ídolos máximos, Jim Morrison: "A friend is someone who gives you total freedom to be yourself." Y eso es lo que te da Ceci, ella es una mina libre que deja ser. Eso, en una amiga es imprescindible.

Entonces, ¿por qué la elegí?

Si hay algo que la caracteriza es que es muy entretenida, JAMÁS te vas a aburrir con ella. Todo lo que te cuenta, te lo dice de una manera tan atrapante, que incluso si te está contando cómo tiró la caja de pizza al tacho, querés saber cómo lo hizo. Tiene una facilidad impresionante para convertir eventos cotidianos en argumentos de películas. Es clara, interesante y condimenta muy bien sus descripciones con pequeños touches de suspenso que contribuyen a que quieras saber más. Yo escuchaba los argumentos de las pelis con el mismo entusiasmo con el que vería un trailer. No hacía falta ver imágenes, ella te las representaba.

Sí, Ceci es muy carismática y también, determinada. Cuando se le mete algo en la cabeza, no hay quien la pare. Estudió comunicación conmigo, pero por esas cosas de la vida, dejó la carrera porque no la motivaba. Hace un año, se enteró de la posibilidad de irse a vivir a Londres con el novio, y para eso, reconoció que primero debía conseguir el título. Con esa motivación detrás, se puso las pilas, y rindió 10 materias en menos de seis meses. En la UBA eso es un disparate. Es más, para muchos eso hubiera sido una misión imposible, inconcebible siquiera. Mas, ella no vio vallas, sólo trampolines. Focalizó todas sus energías en estudiar y rendir las materias. No desvió su atención con nada ni nadie. Se puso un objetivo e hizo todo lo necesario para cumplirlo. El poder que demostró, es admirable. Y esto es un ejemplo de que todo lo que se propone lo consigue. Es perseverante, determinada, y encima, encantadora. Con ese combo, estoy segura que va a tener Londres a sus pies.